NACIMIENTO DE NUESTRO
HIMNO
AUTOR: SOM (F.) SR. GUSTAVO GONZÁLEZ CORTÉS
¡Curso Afecto de Faros!, ¡al
compaaaas! ¡maaaar!, era la orden del instructor de faros, Sargento 1° (F.)
Jorge Álvarez Barraza, la columna comenzaba la marcha hacía la sala de clases
con la entonación de las estrofas que componían nuestro inédito himno que por
primera vez veía la luz en el año 1977, las melodiosas estrofas llenaban los
pasillos de la añosa Escuela de Abastecimiento y Servicios (antigua Escuela
Naval), donde eran cobijados los futuros especialistas en faros, ...con inmenso
sacrificio y lealtad..., se estaba en busca de la melodía y cuadratura a los
versos que darían forma al himno escrito por los entonces Marineros Carlos Lavandero Marianjel y Enrique
Esparza Ibarra.
Los jóvenes marineros que
tuvieron la honra de entonar por primera vez este himno fueron los componente
del curso de afectos en faros promoción 1977, me refiero a los Marineros 2° (Mr.): Luis Bravo
Ríos, Antonio Díaz Pinto, Roberto Fernández Barrera, Gustavo González Cortés,
Jorge González Vargas, Luis Guzmán Lorca, Jorge Olivares Olivares, Carlos
Oyanader Morales, Rómulo Saavedra Guzmán, Audito Troncoso Muñoz, Ricardo Vargas
y Carlos Velásquez, este grupo de nuevos aprendices a la especialidad, llegaron
durante el mes de julio del citado año a conformar el curso que les daría los
conocimientos básicos para lo que sería su futuro en la Armada de Chile, la
especialidad de Faros, un semestre de orientación, 2 años de conocimientos en
terreno y luego 1 año para la especialización definitiva.
Los “fareros”, personas
reconocidas dentro de la marina como aquellos que pueden rendir en donde se los
mande a trabajar, son individuos con mística y tesón, muchas historias adornan
su vida, poetas de por sí, debido a su
gran gusto por la escritura y la lectura, llenos de sabiduría, guardianes del
encanto de los faros más importantes de nuestro país y del mundo, forjadores de
historias novelescas y casi fantásticas; palabras pueden haber una infinidad
para describir a este hombre de mar que con su labor silenciosa, las distintas
generaciones han desempeñado por años con mucho sacrificio y lealtad, la gran
labor de mantener destellando la luz de ese faro tan necesario para los
navegantes, como un coloso que otea vigilante al horizonte, atento a su labor
de prestar ayuda a los navegantes, sin importar nacionalidad o tipo de nave,
todos reciben los frutos del trabajo del farero, el amigo fiel que está ahí
cuando se lo requiere, para dar una palabra de aliento o para ir en ayuda del
necesitado, el juramento al pabellón nacional dice en parte de su
contenido...”hasta rendir la vida si fuese necesario”..., la tierra que nos vio
nacer así lo exige, la labor del farero comúnmente se efectúa lejos del hogar y
de los seres queridos.
En días calmos la navegación es
tranquila, pero cuando arrecia el mal tiempo y aparecen los temporales, las
lluvias torrenciales, los vientos huracanados con mares arbolados y confusos,
la luz del faro pasa a ser de una importancia relevante, aquel destello que
busca el navegante para tomarlo como guía, es la luz de la esperanza, la que
indica que va por buen camino y que pronto llegará a aguas seguras, esa es la
señalización marítima.
Nuestro faro con su labor
abnegada de centinela sobresaliendo majestuoso en aquellos lugares donde se le
necesita, guía con su luz a los navíos por rutas seguras, siempre encontraremos
en lugares alejados y solitarios esa luz necesaria o a través de las ondas
radiales la voz del amigo farero dando la voz de alerta de las situaciones que
ocurren en la mar.
La formación del especialista
en faros es en si compleja, por ser esta una especialidad de servicio y que
requiere por parte de los postulantes una gran cuota de vocación, ya que este
deberá sacrificar momentos importantes de su vida cuando ingrese al servicio de
faros.
Del contenido de este pequeño
resumen, podemos rescatar las características más importantes de los versos que
dan forma a nuestro himno.
Han pasado 35 años desde que se
escuchó en la voz de aquel curso de marineros afectos el himno de faros, ahora
ya en su madurez a llegado el tiempo de que lo adoptemos como nuestro y con el
podamos entonar a la Institución y a nuestro país, el trabajo silencioso y de
gran importancia que realizan en Chile los especialistas en Faros.
HIMNO DE FAROS
I
Con inmenso sacrificio y lealtad
Mantenemos los colosos vigilando
Y servimos a la Patria cooperando
A los buques nuestros mares navegar.
Responsables y con gran fidelidad
Por cumplir no nos importa dar la vida
Serviremos a nuestra Patria querida
Solitarios y alejados del hogar.
CORO
Señalización Marítima
Ayudando a la navegación
Con buen tiempo o gran temporal
Señalización Marítima.
II
Nuestro Faro siempre en gloria y majestad
Sobresale luminoso en los lugares
Que el navío necesita de algún guía.
Siempre lejos y en completa soledad
Donde espere algún peligro al navegante
Se alzará siempre algún Faro triunfante
Dando aviso cual vigía al navegar.
CORO
Señalización Marítima
Ayudando a la navegación
Con buen tiempo o gran temporal
Señalización Marítima
Con buen tiempo o gran temporal
Señalización Marítima.
Mis más fraternas felicitaciones a estos GRANDES HOMBRES, que con mucha vocación, entregan sus conocimientos y perfeccionamiento a mantener siempre encendida aquella luz o destello que marca la ruta o peligro a la navegación. Tuve la oportunidad de estar y compartir entre Ustedes y fue una gran oportunidad
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