martes, 16 de octubre de 2018

Ocaso de un farero



Acá les dejo una historia conmovedora sobre lo que le ocurre a gran parte de las personas cuando cumplen con la etapa de dejar de trabajar por motivos de jubilación, termino de una carrera o por mejores perspectivas, el motivo puede ser diverso, léanlo puede ser cualquiera de Uds.
Gustavo González Cortés






EL OCASO DE UN FARERO
Autor: S 1° (F.) Roberto Araneda Torres

El ruido producido por los cascos de los caballos en el pedregoso sendero que une el Faro Cabo Raper con Puerto Slight se confundía con el golpeteo incesante y furioso del oleaje propio del Golfo de Penas. Apenas empezaba a amanecer y, junto al que había sido mi Jefe por cuatro largos meses, cabalgábamos por última vez juntos aquellos 8 kilómetros que tantas veces recorrimos, ya sea por traslado de pertrechos o despejando el camino de algún árbol que no soportó las inclemencias del crudo invierno austral.

La Armada nacional aun mantiene algunos faros dotados de personal con la finalidad de prestar diversos servicios a los navegantes que surcan nuestros mares y el Cabo Raper, enclavado en la península Tres Montes, es uno de ellos. Grupos de cinco “fareros” son los encargados de custodiar, operar y mantener estos míticos vigías del mar por períodos de cuatros meses, alejados de sus seres queridos y sólo manteniendo comunicación radiotelefónica una vez por semana con ellos.

El Suboficial Torres se caracterizaba por ser muy parlanchín, sus “años de circo”, como el solía decir, le proporcionaban mil historias que contar, pero aquella mañana no murmuraba palabra. En nuestro tercer mes de aislamiento había recibido la notificación de su llamado a retiro y hasta el último día pareció no afectarle la noticia, por eso me atreví a romper el silencio. ¿Qué se siente saber que este fue su último aislamiento jefe?, pregunté con cierto temor; primero por el respeto que aquel hombre me inspiraba y, en segundo lugar, porque sentía que mi pregunta podría resultar imprudente.

¡Pena muchacho!...¡Mucha pena!; son tantos años de entrega y sacrificios los que hoy dejo atrás, tantos buenos amigos y compañeros…, solo me resta darle gracias a Dios y a la vida por haberme permitido trabajar en este servicio tan Noble como desconocido para el común de la gente.

Pero al menos ahora podrá disfrutar un mayor tiempo con su familia, agregué, como queriendo animarle un poco.

Eso es seguro, es mucha la deuda con mi esposa y mis hijos; tantas navidades, cumpleaños y fechas importantes lejos del hogar…, en todo lo que me reste de vida no podré compensar el sacrificio que, sin querer, demandé de ellos. ¿Suena algo dolido mi Suboficial?, dolido no es la palabra, al fin y al cabo este fue mi trabajo y siempre traté de cumplirlo de la mejor manera posible, sin pensar en los costos afectivos y emocionales de los míos. Sucede que nuestro oficio es único, se aprende a quererlo a partir de las dificultades y el sacrifico diario, eso lo hace especial, porque sabemos que al final del camino no habrá despedida pomposa ni reconocimiento alguno. Sólo nos queda la satisfacción de la labor bien cumplida, porque pasarán los años, trayendo consigo sus nuevas tecnologías y la luz de nuestros faros seguirá guiando las rutas de los barcos y, los navegantes afligidos seguirán necesitando de nuestra palabra de aliento en medio del temporal, solo siento orgullo de haber realizado en mi vida una labor que debe ser de las más queridas y bendecidas por Dios, porque tal como su Iglesia; la luz de nuestros faros “ilumina”, “guía” y “salva”.

El sol ya dejaba ver sus primeros rayos del día por detrás de los cerros, dejando ver un par de lagrimones que rodaban por aquel rostro curtido y arrugado, los que el viejo trató de ocultar vanamente, al momento que llegábamos a nuestro destino.

El buque que nos llevaría de regreso Puerto Montt ya estaba anclado en la hermosa bahía de Puerto Slight y, los primeros botes ya iniciaban las maniobras de acarreo de enseres para la dotación entrante. La faena fue ardua aquél día; se sucedieron tambores de petróleo, cilindros de gas, víveres, alimento para los animales, en fin, todo lo necesario para el período que se iniciaba y el Suboficial Torres trabajó sin desfallecer, como el más novel de la tropa. Era de aquellos hombres que enseñaban con sus dichos y sus acciones.

Hoy, que el paso de los años me acercan cada vez más al final de mi camino en este trabajo, sus palabras resuenan en mi mente, cual presagio del que será mi propio ocaso como farero.

No he vuelto a ver a aquél hombre, recuerdo su silueta apoyada en la borda del buque con la mirada perdida en el horizonte, mientras un faro y sus destellos indicaba el ingreso a uno de los tantos canales del sur.

domingo, 7 de octubre de 2018

Postales y fotos antiguas

Nuestros faros también han servido para mostrar un paisaje de nuestro país o para usar de fondo en una fotografía para el recuerdo.


Postal del faro Caldera con las casas del guardián




 Faro de Corral hacia 1899




Faro Punta Ángeles hacia 1910




Faro isla Santa María




Faro punta Panul hacia 1957




Faro Monumenyal de La Serena, inaugurado en 1953



 Faro Tres cruces, Chacao




Faro de Niebla



 Faro del Oeste isla Mocha, 1903




 Punta Ángeles hacia 1938




 Monumental de La Serena 1952




Faro Ráper torre y tren

domingo, 17 de junio de 2018

Ingeniero de faros Don Sabino López Díaz


INGENIERO NAVAL DON SABINO LÓPEZ DÍAZ
(1901-1993)

Recopilado por: SOM Sr. Gustavo González Cortés

Biografía preparada en noviembre del año 2016 por el Señor José Miguel López Santa María, hijo de don Sabino López Díaz, quien reside en la ciudad de Santiago.
Don Sabino López nació un 28 de diciembre de 1901, en la comuna de Lautaro, Provincia de Cautín, Novena Región de la Araucanía, hijo del agricultor Don Evaristo López Valenzuela y de Doña Justina Díaz del Villar, fue el tercero de nueve hermanos.
Realizó sus estudios de enseñanza básica en una escuela de la ciudad de Lautaro, y los de secundaria en el más que centenario liceo de hombres de Temuco, coincidiendo en la época con Neftalí Reyes (Pablo Neruda).
En diciembre de 1918, llegó al liceo una comisión examinadora de la Armada, presidida por un Capitán de Fragata Ingeniero, dicha comisión promocionó la carrera naval en la especialidad de ingeniería y tomó examen a los 4 alumnos que se interesaron, entre ellos al joven Sabino que había ya cursado el tercer año de humanidades. Dio exámenes para ingresar al segundo año de la Escuela de Ingenieros en las materias de matemáticas, geometría y castellano. Fue el único aceptado y con tan buenas calificaciones que se le nombró de inmediato "Cadete con beca", es decir, que quedaba exento de pagar los gastos de internado en la Escuela de Ingenieros. Cabe destacar que en esa época, casi todos los cadetes ingresaban como "súper numerarios" y después de algún tiempo, cuando obtenían muy buenas notas, se les nombraba Cadete con beca, quedando exentos de pagar el internado en esa Escuela de la Armada. Don Sabino ocupó el primer lugar de su curso en tercero y cuarto año y al egresar ocupó el 2° lugar con muy buen promedio de notas, lo que le permitió dar examen para ascenso en un año. En esa época, para dar examen de ascenso había tres plazos, que dependían de las calificaciones: un año, un año y medio y dos años. Quienes daban el examen al año y ascendían, quedaban en el escalafón por sobre algunos egresados el año anterior.
En diciembre de 1922 egresa de la Escuela de Ingenieros Mecánicos de la Armada de Chile en Talcahuano, y el 20 de enero siguiente, recibe su nombramiento como Oficial Ingeniero de la Armada y es embarcado por 2 meses en el Crucero Chacabuco, luego hace el viaje de instrucción por 10 meses en el Crucero Blanco Encalada y al finalizarlo se le trasborda al Acorazado Almirante Latorre, donde permanece por 6 meses en el departamento de máquinas y calderas, desempeñándose como ayudante del ingeniero electricista de cargo, el Teniente 1° Ingeniero Armando Ramírez Barceana.


El cadete Sabino López D.
Tuvo a su cargo la red del servicio telefónico del acorazado y le correspondió participar en la maniobra de la primera vez que el Latorre entró al dique N° 2 de Talcahuano en 1925. En esa oportunidad hubo una minuciosa preparación debido a la fuerza de inercia del buque de 24.000 toneladas, detalladas reuniones se realizaron analizando todas las alternativas. Se destacó la gran importancia de las comunicaciones telefónicas para dar las órdenes desde el puente de mando, como así mismo para la coordinación entre los departamentos y los puestos de trabajo en las máquinas, toldilla, winches de costados, castillo, etc.
El ingeniero López además fue el único instructor que impartió dos ramos, matemáticas y electricidad a los cursos de Cabos y Sargentos Electricistas, algunos de los alumnos de esos cursos se especializaron después en girocompases y en rayos X, con posterior desempeño abordo y en el Hospital Naval. Varios de estos alumnos ascendieron posteriormente a Oficiales de Mar.
En Marzo de 1926 llegó al Acorazado Latorre una comunicación del Director del Territorio Marítimo y de Marina Mercante, ofreciendo especializarse en Señalización Marítima a los oficiales ingenieros jóvenes, en vista que quien desempeñaba el cargo debía jubilar. Aceptaron la oferta el Teniente 2° Ingeniero Nemesio Ruiz Álvarez y el Subteniente Ingeniero Sabino López Díaz, después de estudiar por 6 meses en libros y catálogos y de visitar en detalle varios faros, analizar los mecanismos, motores, maquinarias de bocinas de neblina y demás elementos de señales, el teniente Ruiz decidió volver a embarcarse y el subteniente Sabino López decidió aceptar el cargo en el Departamento de Faros de la Dirección del Territorio Marítimo y M.M., aunque por ello debió renunciar al escalafón de Oficiales Ingenieros y quedar como civil en la Armada de Chile.
En septiembre de 1926, se le nombra Ingeniero del Servicio de Faros y Señalización Marítima, donde prestó sus servicios hasta diciembre de 1954. En dicho cargo le correspondió proyectar la construcción de unos 130 faros, 6 radiofaros, 10 boyas luminosas, 15 radioteléfonos, algunas luces de enfilación y otras señales a lo largo de nuestro litoral. Dirigió personalmente en terreno la construcción de más de 20 de estos faros, algunas casas para guarda faros, caminos, desembarcaderos y servicios anexos.
Cuando ingresó al Servicio de Señalización Marítima en 1926, no había buena señalización nocturna para los canales de las regiones de Aysén y de Magallanes, por lo que los buques que navegaban esas zonas debían pernoctar en los fondeaderos de los canales esperando la luz diurna o en su defecto navegar por alta mar.
Por el año 1945 dirigió el montaje de una fábrica de Gas Acetileno especial para los faros, en Las Salinas, Viña del Mar, donde actualmente se encuentran ubicadas las dependencias deportivas del Club Naval de Campo.


En 1945 como Jefe de la Sección Faros

En la revista MAR N° 126, de marzo-abril de 1948, se publica un anteproyecto de canalización del estero Marga-Marga de Viña del Mar, elaborado por el ingeniero López, siempre inquieto por colaborar y proponer acciones beneficiosas para la sociedad en que estaba inserto.
El año 1951 viaja a La Serena en inspección previa a la recepción del faro construido por el Ministerio de Obras Públicas, obra que la Armada no financió por considerarlo inútil desde el punto de vista de ayuda a la navegación.
En diciembre de 1954, el ingeniero naval don Sabino López Díaz, se acoge a retiro de la Armada con más de 35 años de servicio.
Desde 1956 el ingeniero López se desempeñó como Inspector en Chile del Bureau Veritas, institución internacional con sede en Paris dedicada al control de construcciones y reparaciones de buques, plantas generadoras de energía y clasificaciones de materiales en general. Por su desempeño y detallados informes con planos explicativos de varias reparaciones de buques, recibió felicitaciones. Presenta su renuncia voluntaria al puesto en el año 1961.
Desde 1959 hasta 1981, atiende diversos trabajos en sociedades y empresas, como asesor técnico en maquinarias y edificaciones.
Paralelamente, en 1971 pasa a integrar el Directorio del Hogar de niños Arturo Prat, donde a comienzos de 1973, el presidente del directorio, Almirante Manuel Quintana, propuso la conveniencia de crear talleres para la enseñanza de algunas técnicas, para lo cual el directorio encomendó tal tarea al director secretario don Sabino López Díaz., tomando en consideración que los niños egresados de 8° año básico de la escuela del hogar, debían salir con herramientas necesarias para ganarse la vida y continuar su progreso, de inmediato hizo construir un muro de contención en el recinto para hacer espacio donde levantar un galpón, tarea que llevó a efecto con la ayuda de ASMAR. Luego logró gestionar con la administración del puerto de Valparaíso y la embajada de Estados Unidos, la donación de máquinas para talleres, en paralelo se confeccionaban los planes de enseñanza y cartillas con dibujos, a mediados de 1974 empezó en forma normal la enseñanza en los talleres de mecánica, electricidad y carpintería, cada área con un técnico o maestro instructor. Posteriormente, en 1989, el ingeniero López, publicó y donó al hogar Arturo Prat, un folleto con las materias de enseñanza e las instrucciones teóricas y prácticas de las tres especialidades con que los niños salían capacitados para enfrentar la vida.
El año 1974 publica un folleto de 21 páginas sobre el “Faro Islotes Evangelistas" en que entrega informaciones sobre su construcción, otras sobre otros faros, algunas referencias del Servicio de Señalización Marítima y anécdotas.
En octubre de 1978, don Sabino recibe un fuerte golpe afectivo al fallecer su hijo mayor y colega ingeniero mecánico Antonio López Santa María, de 50 años.
El 30 de abril de 1981, la asamblea de socios de la corporación Liga Marítima de Chile, acordó designar a don Sabino López Díaz como socio Honorario luego de 43 años de socio de la institución.
En agosto de 1984, la Asamblea de la Asociación de Servidores del Servicio de Señalización Marítima, ASERMAR, por unanimidad, le designó como socio Honorario, "por su dilatada carrera profesional en el Servicio de Faros y Señalización Marítima de la Armada de Chile, en cuyas décadas de labor planificó y construyó importantes faros y radiofaros en nuestro extenso litoral".
En abril de 1990 le afecta otro golpe afectivo al fallecer su esposa señora Juanita Santa María Nieto.
Durante la celebración del 68° aniversario del Hogar Arturo Prat, en el año 1990, los alumnos del establecimiento entregaron un galvano de reconocimiento al Ingeniero don Sabino López, por haber cumplido 30 años ligado al quehacer de dicha institución.

1991 de visita en el faro Punta Tortuga
En junio de 1992, el Consejo Zonal Valparaíso del Colegio de Ingenieros de Chile AG, en sesión N° 4/92, acordó por unanimidad distinguir al Ingeniero Sabino López Díaz como Ingeniero Meritorio de la V Región del año 1991, en reconocimiento a su brillante trayectoria como ingeniero.
El 14 de octubre de 1993, con casi 92 años, este viejo lobo de mar tomó su barco, levo anclas, preparó las velas y partió en su viaje eterno. Sin lugar a dudas su navegar será con buen tiempo, mar llana y con el amor de los que le precedieron, su esposa e hijo mayor, y con el cariño de tantos, de todas las condiciones sociales y económicas, a quienes ayudo silenciosamente sin esperar reconocimiento ni agradecimiento. Fue buen estudiante, estudioso siempre, responsable y cumplidor de su deber como profesional, como esposo, padre, abuelo, hermano y familiar. No solo amo a la Armada como hombre de mar, sino también fue hombre de campo, nacido y criado en el campo, plantó árboles y cosecho de la tierra. Así como también plantó bondad, sabiduría, cordialidad, amistad, buenos consejos y cosechó cariño y admiración. Cultivó la paciencia, el sacrificio, la abnegación, la sencillez, la perseverancia, la caridad y el amor al prójimo.

domingo, 10 de junio de 2018

Elementos de Protección Personal

A TRAVÉS DEL VÍNCULO QUE MOSTRARÉ A CONTINUACIÓN LES PRESENTO EL PROYECTO ELEMENTOS DE PROTECCIÓN PERSONAL PARA SEÑALIZACIÓN MARÍTIMA DE LA ARMADA DE CHILE, UN APORTE AL BLOG EFECTUADO POR EL INGENIERO EN PREVENCIÓN DE RIESGOS Y ACTUAL ESPECIALISTA EN FAROS DON CRISTIÁN MUNOZ GUZMÁN, TRABAJO EFECTUADO EL AÑO 2013, PARA EL INSTITUTO AIEP DE LA UNIVERSIDAD ANDRES BELLO.


Elementos de Protección Personal





martes, 22 de mayo de 2018

viernes, 13 de abril de 2018

Fotos históricas de los faros en Chile

Aquí les dejo unas pocas fotos históricas que escogí para quienes visitan este blog, en este albúm recopilé varias del Faro Cabo Ráper donde se muestra las distintas etapas durante su construcción, podemos observar el viaducto ferroviario, los cortes en el camino, la torre y la casa, y además consideré otras fotos de los faros de nuestro país Chile, espero les gusten:


1.-FOTOS DEL FARO CABO RÁPER:



Construyendo la torre de Ráper





Corte del cerro en el camino a Ráper





Parte del viaducto de Ráper  y los trabajadores que lo construyeron





Viaducto subiendo hacia el faro 





Muelle y grúa manual en muelle faro Ráper





Casa del faro Ráper en su etapa final





Vista panorámica de faro Ráper finalizado





Ráper con modificación en su torre




2.- FOTOS DE OTROS FAROS Y ACTIVIDADES:



Reaprovisionando faro Evangelistas





Faro Punta Curaumilla





Antiguo faro isla Santa María





Aerogenerador Aerowatt en la zona de Magallanes





Faro Punta Ángeles y Subdepartamento de faros Valparaíso





Bajo Belén (Talcahuano)





Mantenimiento de faros con chalupas en la zona austral





Faro Punta Dúngeness en Magallanes





Cambio de gas acetileno a electricidad, faro Extremo de Abrigo de Valparaíso  





Antigua torre y cabaña del faro islotes Evangelistas en Magallanes





Faro Cabo Espíritu Santo en Magallanes





Faro punta Lengua de Vaca cerca de Tongoy





Faro isla Quiriquina, Talcahuano




Antiguo faro Punta Ángeles, Valparaíso






Baliza luminosa automática en la rampa Caleta Puelche, región de Los Lagos











jueves, 8 de febrero de 2018

Fotos del 2018 PMO/TALC/PAR



Faro Punta Hualpén






 Faro Punta Hualpén con AIS ATON





 

Faro Punta Hualpén (panorámica)






Punta Kirke Sur, inicio trabajos






Punta Kirke Sur, instalando antena AIS ATON







Punta Kirke Sur, comprobando programación






 Punta Restinga (Paso Kirke)






Panorámica del Paso Kirke desde Punta Restinga






Punta Restinga en el Paso Kirke 






 Muelle de Puerto Montt con AIS ATON






Trabajando en la caja de conexiones en Puerto Montt